Si quieres conseguir unas piernas suaves y preciosas, toma nota de estos consejos que te serán de mucha utilidad al depilarte.

1. Duele más pero es muy efectivo: Depilar vs Afeitar

La cera es uno de los métodos más eficaces para eliminar el vello. Lo elimina de raíz y, aunque ciertamente es más doloroso, retarda bastante su aparición. También son muy aconsejables las máquinas depilatorias que hay ahora en el mercado, de diversas marcas y con variadas prestaciones. Si dudas, opta siempre por una de estas fórmulas frente a la tradicional maquinilla de afeitar, que solo corta lo que está en la superficie. Al final tendremos que estar cada pocos días yendo al aseo a eliminar el antiestético pelo de piernas y zonas íntimas.

 

2. Preparar la piel antes de la depilación

Es recomendable eliminar toxinas e impurezas antes de ponernos manos a la obra. Por lo general, está bien el día previo exfoliar la piel con suavidad, utilizando un producto exfoliante ligero.

 

3. Nada de cremas hidratantes el día D

Al menos, en los instantes previos pues puede dificultar de manera considerable el recurrir a los métodos depilatorios citados, a todos ellos (incluyendo el afeitado). Si bien a posteriori es recomendable, como veremos más adelante, lo ideal es realizar el tratamiento con la piel totalmente limpia y seca, lávate antes con agua fría y después déjala completamente seca utilizando una toalla.

 

4. A posteriori, una buena hidratación

Al terminar, enjuaga la zona con agua fría, es la mejor forma de calmar la epidermis y ayuda a cerrar todos los poros. Aplica una crema corporal hidratante. Hay lociones específicas para después del depilado y encontramos opciones para todo tipo de pieles. Quienes la tienen sensible es importante que recurran a los productos específicamente creadas para estas. Has de ponerla de forma suave y con movimientos circulares, hasta que se absorba completamente. No se trata de untar en cantidad, sino de saber aplicarla bien, ‘con calidad’. En las 24-48 horas después nada de usar exfoliantes u otros artículos que puedan ser abrasivos. La reacción de la dermis puede ser complicada, la verdad, y nadie quiere erupciones ni enrojecimientos en la piel.

 

5. No tomar el sol al día siguiente… e incluso dos días después

Hay que entender que dejamos la piel un tanto expuesta a agentes externos por lo que, especialmente en verano, hay que ser precavidos. Pasado un tiempo prudencial –esas 24-48 horas–, vuelve a la protección solar de factor 50 pues dejamos la superficie cutánea un tanto vulnerable a los efectos de las radiaciones solares.