Se acerca uno de los momentos más esperados del año, unos días que probablemente para muchos sean sus primeras jornadas de vacaciones. Nos referimos a la Semana Santa y de degustar la gastronomía típica de estas fiestas.
1. Potaje de vigilia
Para empezar un plato fuerte, una propuesta de Cuaresma que está entre los guisos más elaborados el Viernes Santo. Se elabora en diferentes zonas de España pero es especialmente conocido en Castilla y León. Lleva bacalao en salazón, garbanzos, ajos, cebolla y espinacas, huevo y una cucharada de pimentón. Las maneras pueden variar sensiblemente según nos vamos moviendo de una comunidad a otra pero en esencia estos son los ingredientes.

2. Bacalao ajoarriero
Como no se podía comer carne y este era un pescado accesible para la mayor parte de la población, es por ello que aparece en buena parte de las recetas de platos típicos de Semana Santa. El bacalao ajoarriero es igualmente muy conocido en partes muy diversas de la geografía española, de norte a sur y de este a oeste. ¿Qué lleva exactamente? Se trata de una receta que presenta bacalao desmigado en tomate frito casero, con pimientos choriceros, patatas, aceite de oliva y una cucharadita de perejil.

3. Patatas a la importancia
Típica de Castilla y lleva patatas, huevos, cebolla, ajo, harina, aceite de oliva, perejil y azafrán y es fácil de preparar. Se suele servir en cazuela y normalmente acompaña a otro plato, preferiblemente pescado teniendo en cuenta que en Semana Santa se evitan productos cárnicos.

4. Mona de Pascua
Vamos a los postres. Si eres especialmente goloso, en Semana Santa encontrarás un delicioso contrapunto dulce a tanto bacalao y sabores salados. Para empezar la mona de Pascua, que es muy típico en buena parte de España, especialmente en Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla-La Mancha. ¿Qué es exactamente este plato típico de Semana Santa? Es una especie de bizcocho que puede llevar relleno y con guarnición por encima. Se hace con huevos y harina, azúcar, levadura… Para decorarlo, nata líquida, chocolate, mermeladas, etc. ¡No dejarás ni un trocito!

5. Torrijas
En Andalucía se preparan mucho y muy bien. Estamos ante uno de los dulces más característicos de preparar de la Semana Santa, pues la clave está en utilizar pan duro de días anteriores. De hecho, esta merienda surgió de la necesidad de querer reaprovechar todos los alimentos que fueran sobrando, entre ellos el pan que se quedó duro. Si te animas, es sencillo para poder hacerlos en tu propia cocina. Necesitas pan cortado en rebanadas gruesas, leche, aceite, miel, azúcar y huevos. Básicamente tienes que mezclar la leche y el azúcar y bañar el pan en ellos y en huevo batido. A continuación, a una sartén con aceite hirviendo y… Voilà! Sin palabras.

6. Pestiños
Otra receta muy andaluza y también extremeña. Los pestiños se comen igual en Semana Santa que cuando llega la Navidad y no ha de extrañarle a nadie, ¡están riquísimos! Si eres un goloso de los de verdad, ¡a por ellos! Se preparan con harina, aceite de anís, agua, cáscara de naranja y miel. Se prepara en poquísimo tiempo, otro punto a su favor, así que igualmente si eres cocinillas puedes animarte a hacer pestiños y torrijas en casa.

7. Marañuela
Del sur al norte, concretamente a Asturias, de donde procede esta séptima sugerencia de platos de Semana Santa que deberías probar. Nos referimos a la marañuela, unos pasteles que se hacen con harina, azúcar, huevo, manteca y raspa de limón y que se preparan especialmente el domingo de Pascua. Son con forma de espiral y los toman tanto en el desayuno, para acompañar el café, como en la merienda para endulzar la tarde.

Esperamos que con estos siete platos típicos de Semana Santa te hayamos despertado el apetito. Ya queda poco para que lleguen las vacaciones, cuenta atrás para ir planificando escapadas y lugares que visitar así como restaurantes donde comer delicias tan tradicionales como estas.