¿Buscas un destino para tus próximas vacaciones que sea exótico y original y al que puedas viajar con tranquilidad? Singapur reúne esas condiciones y otras muchas que lo convierten en un destino muy recomendable. Nosotros te ofrecemos aquí 8 motivos para viajar a Singapur aunque, una vez allí, seguro que descubrirás muchos más…
1. Conocer otro continente
Además de conocer un nuevo país, es posible que viajar a Singapur te permita pisar por primera vez un continente que aún no habías explorado en tus viajes. Puede que, además de Europa, tus viajes te hayan llevado a un continente cercano como África o a uno más lejano -en lo geográfico- como América, pero probablemente aún no hayas estado en Asia. Singapur es un buen lugar para estrenar un continente en nuestro particular currículum de viajes.
2. Admirar su skyline
Los rascacielos de Singapur conforman un singular skyline que merece la pena descubrir y admirar en diferentes momentos del día, pero sobre todo en uno muy especial que te desvelamos a continuación…
3. La magia que desprende de noche
Singapur es una de esas ciudades que, sin dejar de ser atractivas durante el día, luce un aspecto especial por la noche. Aunque la luz natural le sienta muy a Singapur, lo cierto es que la iluminación nocturna dibuja un paisaje urbano sencillamente espectacular.
4. Parque de Merlion
En el parque de Merlion se encuentra la estatua del mismo nombre con cabeza de león y cola de león convertida en símbolo de Singapur. En realidad, no se trata de una estatua, sino de dos: una más grande, la más conocida, que echa agua y otra más pequeña.
5. Little India
Little India (Pequeña India) es uno de los barrios más emblemáticos de Singapur. Pasear por sus calles te traslada, al menos mentalmente, hasta la India. Si tuviéramos que elegir una sola palabra para definir a esta zona de Singapur, esa bien podría ser “color”. Y no sólo por el colorido de sus casas, sino también el de sus calles, mercados y restaurantes.
6. Chinatown
Chinatown es otro de los barrios más populares de Singapur que merece la pena visitar y una zona llena de comercios, restaurantes… y de gente.
7. Obras de arquitectura e ingeniería
Singapur reúne una interesante colección de joyas de la arquitectura, con sus rascacielos y edificios singulares, y de la ingeniería, como el original Helix Bridge (Puente de la Hélice) que une el distrito CBD con el barrio de Bayfront y que, como no podía ser de otra forma, también presenta un imponente aspecto de noche gracias a su iluminación.
8. Disfrutar de su gastronomía
En Singapur podemos comer muy bien a un precio realmente económico. Las brochetas marinadas de pollo o cerdo (satay), las sopas de fideos (laksa), el arroz con pollo y los langostinos y carne de cerdo picantes con bambú (rebong char) son sólo algunos de los platos más habituales que podrás degustar en Singapur, donde la cocina tiene grandes influencias de la gastronomía de China, India y Malasia.
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