Lo primero que hay que decir es que sí, sí es posible disfrutar de Oporto en dos días. Tendrás que madrugar y aprovechar bien cada hora, seleccionar (algo se tiene que quedar fuera), pero dos días son suficientes para enamorarte de esta bella ciudad y sin ir contrarreloj. Sin prisa, pero sin pausa. Y nosotros queremos ayudarte en esa labor de filtro que deberás hacer. Esta es nuestra propuesta sobre cómo disfrutar de Oporto en 48 horas. Lugares de visita imprescindible. Experiencias de vivencia inexcusable. Puede que incluso te dé tiempo a visitar alguno de los pueblos que rodean Oporto.
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1. Avenida de los Aliados
No hay mejor lugar para empezar tu ruta por Oporto que la Avenida de los Aliados. Sus edificios modernistas, con el Ayuntamiento como destacado, te dan la bienvenida a una ciudad que atrapa. Es el corazón de la urbe. Desde allí tienes opciones infinitas para dirigir tus pasos hasta la siguiente parada, sea la que sea.

2. Plaza de la Libertad
De la arteria principal de la ciudad, a, sin duda, la plaza más importante. De ella sale la Avenida de los Aliados y separa el Oporto viejo del moderno. Fue construida en el siglo XV y en su centro hay una estatua ecuestre del rey Pedro IV. Tiene 10 metros de altura y se construyó en 1862.

3. Catedral
Nos vamos de la parte baja de la ciudad. Volveremos. En la respuesta a cómo disfrutar de Oporto en 48 horas no podía faltar una visita a la Catedral. Está en el barrio de Batalha, en la zona más alta de la ciudad (así que además de verla aprovecha para disfrutar de las impresionantes vistas). Es de estilo románico y su construcción comenzó a mediados del siglo XII.

4. Puente Luis I
Otro lugar emblemático de Oporto es el puente Luis I. Si quieres saber cómo disfrutar de Oporto en 48 horas tienes que cruzarlo. Une la ciudad con Vila Nova de Gaia, donde se encuentran las bodegas del vino de Oporto (bien merece alargar hasta allí la visita). Fue inaugurado a finales del siglo XIX. Uno de los ingenieros encargados de su creación fue un discípulo de Gustavo Eiffel. Y se nota.

5. Estación de San Bento
Lo prometido es deuda. Volvemos al centro de la ciudad, de hecho, a un lugar muy cercano a donde lo dejamos antes. Y lo hacemos para visitar una estación. Pero no una cualquiera. La Estación de Ferrocarril de San Bento es un monumento en sí mismo. Se construyó en el siglo IX sobre los restos de un antiguo convento. Los más de 20.000 azulejos que decoran su hall son un espectáculo.

6. Rua Santa Catarina y Mercado do Bolhao
Tres en uno. Mejor dicho, cuatro en uno para saber cómo disfrutar de Oporto en 48 horas. La Rua Santa Catarina es una de las calles comerciales más importantes de Oporto. Allí está, por ejemplo, el histórico café Majestic –de los años 20–, la pequeña capilla de las Almas y, en una calle perpendicular –R. Formosa–, el Mercado do Bolhao. Su construcción comenzó en 1914 y en 2006 fue declarado monumento de interés público.

7. Librería Lello e Irmâo
Antes os recomendábamos visitar un mercado. Y ahora una librería. Una de cuento. De película. Dicen que es la librería más bonita de Europa y una de las más bellas del mundo. También se ha extendido el rumor de que alguna escena de Harry Potter se grabó en ella. Parece que esto se queda en leyenda urbana, pero lo que sí es seguro es que J. K. Rowling, que vivió dos años en Oporto, se inspiró en ella para crear algún paraje de Harry Potter. Está en un edificio neogótico inaugurado en 1906.

8. Cena en la Ribeira
Después de recomendaros monumentos, bares, mercados y hasta librerías… y dejando claro cómo disfrutar de Oporto en 48 horas, una última recomendación que tiene que ver con una experiencia: a la hora de cenar, vete a la zona de la Ribeira y no pierdas la oportunidad de disfrutar de algunos de los platos más exquisitos de la cocina portuguesa a la orilla del Duero.
