Piña, sus beneficios y 5 recetas para disfrutarla (iStock)

Piña, sus beneficios y 5 recetas para disfrutarla

La piña es una de esas frutas que debemos tener siempre en casa por las numerosas propiedades que tiene. Es deliciosa, se encuentra en los comercios durante todo el año y su precio es muy asequible. Además, se puede tomar como postre o en platos de lo más variado. ¿Se puede pedir más?

Algunos de sus beneficios 

La piña es muy baja en calorías y es rica en vitaminas, minerales y fibra. Por eso, se puede tomar sin problemas en regímenes de adelgazamiento. Es lo que más se conoce de esta fruta, pero sus beneficios para la salud llegan mucho más lejos:

Tiene un gran poder antioxidante y retrasa el envejecimiento celular gracias a que es rica en minerales como potasio, hierro, magnesio, yodo y zinc.

– Su aporte en manganeso ayuda a fortalecer el sistema inmunitario y el sistema óseo.

– La piña es rica en bromelina, una enzima que facilita la digestión, refuerza el sistema inmunitario y es un antiinflamatorio natural. En este sentido, por ejemplo, ayuda a contrarrestar el dolor e inflamación de articulaciones,

– Las antocianinas que contiene la piña ayudan a la salud de nuestro corazón y retrasan la degeneración celular. Mientras, el potasio y el sodio son importantes para controlar la presión arterial.

La piña debe ser una fruta imprescindible en tu dieta (iStock)
La piña debe ser una fruta imprescindible en tu dieta (iStock)

– La piña es un diurético natural, además, su aporte de agua tiene un efecto beneficioso para la piel. Por cierto, también ayuda a los procesos de cicatrización aplicada de forma externa.

Funciona como anticoagulante, de modo que ayuda a la circulación sanguínea y a evitar problemas de trombosis.

Facilita la absorción de hierro, por lo que es un buen aliando en dietas para combatir la anemia. Y ayuda a controlar los niveles de glucosa en sangre, así que es una fruta que los diabéticos toleran bien.

En resumen, es una fruta que cuida de nuestra salud y que puede tomar prácticamente todo el mundo sin contraindicaciones. Solo personas con problemas gástricos deben evitar consumirla a causa de su acidez.

Recetas con piña para todos los gustos

Una de las grandes ventajas de la piña es que combina bien con un sinfín de ingredientes, de modo que se puede consumir no solo como postre, sino también en todo tipo de platos. Estas son solo algunas ideas muy fáciles:

Salmón con piña, aguacate y mostaza: es un aperitivo delicioso y muy sencillo de preparar. Tan sencillo como partir dados de salmón ahumado, piña y aguacate y aderezar con un chorrito de aceite, una pizca de mostaza de Dijon y unas gotas de salsa de soja.

Ensalada de pasta, piña y nueces: un plato completo, que prepara en poco tiempo y sirve para cualquier ocasión. La pasta se acompaña de taquitos de piña, así como de beicon y de unas nueces que previamente se doran en la sartén. Sea compaña de una salsa elaborada con aceite, un ajo, un poco de cilantro, perejil y unas gotas de salsa picante batidos.

Arroz hawaiano: perfecto para sorprender. En una cacerola se pone a hervir taza y media de agua con piña cortada en trozos y su zumo, dos cucharadas de azúcar moreno y una de mantequilla y una pizca de sal. Se añade el arroz y se cocina tapado durante 15 minutos. Se deja reposar cinco minutos, se añade unas gotas de limón y un poco de cilantro ¡y a la mesa! (También puedes comerlo con salmón como acompañante).

receta arroz hawaiano
Sorprende a tus invitados con este arroz hawaiano (iStock).

Solomillo con piña: una receta para ocasiones especiales. Lo primero es dorar el solomillo y hacer después unos cortes en la parte superior para introducir unos trozos de piña que se habrán pasado por la sartén con aceite, azúcar y una cucharada de miel. En esa misma sartén se hace una salsa con el jugo que han soltado la piña y el solomillo y zumo de pomelo. Se hornea el solomillo 5 minutos a 200º y se sirve regado con la salsa.

Lubina con piña: simplemente se fríe la lubina con una pizca de aceite en la sartén, procurando que quede bien dorada. Se sirve con unas ramitas de hinojo y regada con una salsa hecha con trocitos de piña que se han dejado reposar en zumo de limón.

En todo tipo de postres, en ensaladas, combinada en platos de carne o pescado, con pasta o en pizzas y burritos, la piña consigue dar ese toque exótico y especial a cualquier comida. Y, por su bajo contenido en calorías se puede tomar tanto como se quiera.