No todo el mundo está preparado para pasar sus vacaciones en un camping, sobre todo si no se está acostumbrado, y habrá quien no tenga intención alguna de probarlo. En el polo opuesto se encuentran los apasionados del camping que aprovechan la más mínima ocasión para escaparse y disfrutar del contacto con la naturaleza y de la tranquilidad de ahorrar dinero con el alojamiento. Y entre uno y otro lado están quienes aún no han pasado sus vacaciones acampados pero tienen curiosidad por hacerlo. Para todos ellos, incluidos los que recelan de este tipo de planes, están dirigidos estos 10 consejos para ir de camping:
1. Consultar las normativas de cada Comunidad Autónoma
Si vas a acampar por tu cuenta y no en un camping, debes tener claro que hay muy pocos lugares donde sea legal la acampada libre. Cada comunidad autónoma tiene su propia regulación al respecto y, por si fuera poco, los ayuntamientos también pueden fijar sus propias restricciones. En comunidades autónomas como Baleares, Castilla y León, Castilla-La Mancha, País Vasco, Navarra y Murcia son algo más permisivas que en otras como Aragón, Asturias, Andalucía, Cantabria, Extremadura, Galicia o la Comunidad Valenciana.

2. Elegir una buena tienda de campaña
Ya que vamos a ahorrar dinero con el alojamiento si nos vamos de camping, merece la pena comprar una buena tienda de campaña si aún no la tenemos. Así que, además del precio, debemos tener en cuenta la calidad de los materiales, el aislamiento, el tamaño y la facilidad de montaje a la hora de elegir nuestra tienda de campaña.

3. Llevar una esterilla
Además del saco de dormir, no debemos olvidarnos de llevar una esterilla si ésta no viene integrada en el saco para ganar en comodidad.

4. Repartir el peso correctamente en la mochila
Los elementos con más peso de nuestra mochila deben colocarse en la parte central y no en la inferior –ahí es mejor colocar los objetos que pesen menos- para que la zona lumbar sufra lo menos posible. En la parte superior colocaremos los objetos de peso medio y los que más vayamos a utilizar.

5. No olvidarnos del repelente de mosquitos
Dependiendo de la zona y de la época del año en que nos encontremos nos será más o menos útil tener a mano un repelente de mosquitos. Por si acaso, no te confíes y llévalo siempre que vayas de camping.

6. Preparar nuestro propio botiquín
Aunque el camping disponga de un servicio médico, nunca está de más llevar un pequeño botiquín donde no pueden faltar analgésicos, antiinflamatorios, vendas, gasas, tiritas, alcohol, unas tijeras pequeñas, antiséptico para las heridas y esparadrapo.

7. Llevar ropa impermeable y de abrigo
Aunque vayamos a un camping en verano y a una zona con pocas lluvias, nada nos asegura que no vayan a producirse tormentas ni que se ponga a llover en cualquier momento. Así que no te olvides de tener cerca un impermeable y de llevar ropa de abrigo.

8. Pensar por los pies
Aunque vayamos a ir de camping en verano, debemos llevar más calzado que unas sandalias. Además de unas chanclas para el baño, no pueden faltar el calzado adecuado con sus correspondientes calcetines para no sufrir lesiones mientras practicamos actividades como el senderismo.

9. Llevar todo lo imprescindible
Además del botiquín, la ropa y el calzado adecuados y el repelente de mosquitos, tampoco debemos olvidarnos de otros elementos importantes cuando vamos de camping, desde unos tan necesarios como el agua potable, los alimentos no perecederos y los artículos de higiene personal, hasta otros como los utensilios de cocina, una nevera pequeña, unas bolsas de basura, una linterna y el teléfono móvil.

10. No trasnochar mucho
En un camping no podemos armar jaleo por las noches y debemos respetar las horas de descanso, pero además tampoco es recomendable trasnochar demasiado para no acusar demasiado la falta de sueño por la mañana.
