Si la calefacción no funciona bien, debes purgar los radiadores (iStock)

Cómo purgar los radiadores

Ha tardado –menos mal–, pero ya ha llegado el frío. Es el momento de volver a poner la calefacción y prepararte para el invierno. Si tu calefacción no funciona correctamente, los motivos pueden ser varios, pero uno muy común y de sencilla solución es que hará falta purgar los radiadores.

Tal y como apuntan en la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), un buen mantenimiento de la caldera y, en general, de todo el sistema, es “clave para mejorar el rendimiento de la calefacción, reducir el consumo de energía y tu factura al mes”. Por ello, nos dan 5 claves para purgar los radiadores y equilibrar el sistema de calefacción, que nos vienen de maravilla para este artículo.

Claves para purgar los radiadores

Siguiendo con la información mencionada, explican que en el periodo en el que los radiadores no se usan se pueden crear bolsas de aire en el interior del sistema que afectan notablemente a su funcionamiento. En los purgadores automáticos no hay que hacer nada, ya que ellos mismos expulsan el aire, pero en los manuales hemos de ser nosotros los que realicemos el proceso.  Como consejo general, los radiadores deberían purgarse siempre antes del inicio de la época de calefacción, al comienzo del otoño.

En los purgadores eléctricos no tenemos que hacer nada (iStock)
En los purgadores eléctricos no tenemos que hacer nada (iStock)

Si te preguntas cómo saber si es necesario purgar los radiadores, desde la OCU señalan que “un síntoma clave es que oigas ruidos extraños en el sistema, como gorgoteos. No obstante, la forma más clara de sentirlo es si, al tocar el radiador, la parte superior está más fría que la inferior, ya que el aire tiende a subir”.

El purgado debe hacerse siempre con la calefacción apagada. El radiador debe estar frío, puesto que el circuito de calefacción ha de estar parado para que la bomba de la caldera no mueva el circuito de agua y junto a esta mueva también el aire acumulado en el sistema. “Cuando no hay movimiento en el circuito de calefacción, el aire, al pesar menos, se queda en la parte alta del radiador, de este modo facilita el purgado”.

Para purgar los radiadores, la calefacción debe estar apagada (iStock)
Para purgar los radiadores, la calefacción debe estar apagada (iStock)

Pasos para realizar un purgado de radiadores correcto

  1. Cerrar la llave de paso de agua al radiador que se vaya a purgar, conviene empezar siempre por el que esté más cercano a la caldera, así seguiremos el sentido del flujo del agua dentro del sistema de calefacción.
  2. Ayudándote de una llave inglesa, o de un destornillador en caso de que cuente con una marca para ello, gira la válvula de purgado que se encuentra en la parte superior del radiador. Mantenla abierta hasta que comience a salir agua de forma constante, y sin gorgoteos (coloca un pequeño recipiente en la parte inferior de la válvula para recoger el agua que salga a través de la misma). Será necesario que repitas el proceso en cada uno de los radiadores de la vivienda.
Asegúrate de dejar bien cerrada la válvula después de purgar los radiadores para evitar fugas (iStock)
Asegúrate de dejar bien cerrada la válvula después de purgar los radiadores para evitar fugas (iStock)
  1. Una vez terminado el purgado de todos los radiadores, no olvides revisar la presión del agua de la caldera. Generalmente debe estar entre 1 y 1,5 bares (el manómetro suele estar en la parte inferior de la caldera, y, habitualmente, tiene una zona verde, que es dónde debe colocarse la aguja). Y, ya que estás, aprovecha para limpiar los radiadores.