Queremos pensar que no exageramos cuando decimos que el chocolate con churros es una de las mayores riquezas de la gastronomía española. Al menos por lo que se refiere a la sección de los dulces y sus recetas más sencillas…y más sabrosas. Especialmente en esta época del año.  Darse el placer de desayunar o merendar unos churros  con chocolate caliente es un lujazo al alcance de todos. Tanto si los compráis en una churrería de barrio o en la cafetería más selecta de vuestra zona, como si optáis por prepararlos vosotros mismos en vuestras casas.

A continuación explicaremos cómo preparar en casa los churros y el chocolate caliente. Antes de empezar es importante tener algo en consideración: la preparación de los churros conlleva un riesgo. Hacerlos en una sartén con aceite hirviendo puede provocar explosiones descontroladas y quemaduras en la piel por culpa de estas si no se les da la forma correcta con una churrera. Es muy importante para evitar sobresaltos  comprimir la masa para que no se formen burbujas de aire ni caiga agua en la freidora. Así que abstenerse los que no dominen el oficio, especialmente en su elaboración en sartenes.

Cómo preparar los churros

Para elaborar los churros solo vamos a necesitar tres ingredientes: harina, agua y sal. Lo primero es llenar un vaso con harina. Esa misma medida del vaso la utilizaremos para calentar agua en una cazuela. Una vez hierva la sacaremos y mezclaremos bien el agua con la harina hasta que quede una pasta bastante compacta y pegajosa.

Una vez tengamos la masa será cuestión de darle forma con la churrera. A medida que vayan saliendo los churros (importante que la masa esté compacta y sin espacios de aire) será el momento de pasar a la fritura que se llevará a cabo en una freidora (lo ideal) o en una sartén con abundante aceite hirviendo a fuego medio. Una vez los churros queden fritos solo quedará apagar el fuego, sacarlos de la freidora y ponerles en un plato con papel de cocina para que absorba el aceite. Por último, y no menos importante, espolear con azúcar y listos para servir y  hacer acompañar con el chocolate caliente.

Cómo preparar el chocolate caliente

Para preparar en nuestros hogares el chocolate caliente solo necesitamos de leche, chocolate y una cazuela. El primer paso será poner la leche a hervir en la cazuela o pote. En ese punto se le puede añadir una pizca de azúcar si se quiere endulzar la leche.

Lo siguiente será añadir el cacao. Añadimos el chocolate ( ya sea en tableta o cacao en polvo) con una pizca de sal y empezamos a remover con una cuchara de madera hasta que se funda y cuaje con la leche. Cuando empieza a hervir lo retiramos del fuego y dejamos que burbujee durante un rato. Una vez resuelto este paso ya lo tendremos listo.

Si se prefiere algo más espeso se puede añadir una pizca de harina o almidón de maíz. También puedes condimentarlo una vez hecho con canela o vainilla.

Un plato sabroso pero que requiere mucha cautela en la cocina, y casi indispensable el uso de la churrera.