Se aproxima el final de las vacaciones y con él la temida vuelta al cole. Según las estadísticas, cada familia suele gastarse en torno a 1.200 euros para que sus peques vuelvan a las clases completamente equipados. Si queréis ahorrar un poco, tomad nota de los consejos que podemos daros para que el mes de septiembre no se convierta en la ‘otra’ cuesta de enero.
1. Hacer un inventario de lo realmente necesario
Esto es como cuando vamos al super a hacer la compra: si no tenemos claro lo que hay que comprar llenamos la cesta de cosas innecesarias. En el tema de material escolar y ropa/complementos para el nuevo curso sucede lo mismo. Por eso, antes de nada es importante hacer una lista de aquello que realmente se necesita: uniforme, si hay que renovarlo o no, posibles prendas básicas para acudir a la escuela que puedan necesitar nuestros hijos; libretas, colores, lápices, gomas, etc., es decir, papelería para ir a clase; libros de texto; si este año hay que renovar la mochila, etc.

2. Libros de texto
Hay varias fórmulas para ahorrar en estos imprescindibles. Una de ellas era haberlos reservado con antelación, algo a lo que ya vamos tarde pero que está bien saber para próximos años. Muchas grandes superficies lanzan promociones con descuento si se reservan y adquieren con antelación. Como ya esto no es posible está la opción de ir a tiendas de segunda mano, tanto físicas como a través de internet, donde proliferan muchos sites de intercambio de material escolar. Una tercera manera es comentarlo con amigos, familiares y vecinos que puedan tener niños de edades similares.

3. Becas y ayudas al estudio
Existen iniciativas que cubren de manera parcial o total lo que cuestan los libros de las clases y se dan ayudas para uniformes escolares y otros complementos necesarios para acudir al colegio. Está bien informarse con tiempo en la secretaria de los centros escolares así como a través de la web de la Consejería de Educación de la Comunidad Autónoma en la que nos encontremos.

4. Ropa y calzado
Antes de lanzarnos a comprar sin pensar en las tiendas prendas y zapatos para todo el año, es bueno echar un buen vistazo al armario de los niños, a ver qué hay y qué no hay. Si llevan uniforme es más sencillo, basta con ver que esté en buen estado y que le quede bien de talla para este curso. Si no llevan uniformidad, pues lo fundamental es tener una muda o dos deportivas para las clases de educación física, para el deporte que practiquen; para el día a día, básicos como unos jeans, vestidos sencillos, camisetas de algodón, rebecas o jerseys. En septiembre las grandes superficies y algunas marcas lanzan líneas especiales de vuelta al cole con buenas rebajas y descuentos, ¡échales un ojo! Y siempre está la opción de aprovechar estos ultimísimos días de rebajas de verano, pues suele ponerse a la venta algo de ropa de temporada de otoño e invierno que puede ser nuestros salvavidas.

5. Marcas blancas… también para ir a clase
En material escolar y en moda infantil también hay marcas blancas, por lo que una manera de ahorrar es optar por estas. Pasa por el hiper y seguro encuentras muy buenos precios para determinados productos y artículos que van a necesitar a lo largo del año.

6. Ir de compras sin los niños
Es fácil que ante tantas cosas se les vayan los ojos y empiecen a pedirnos alguna cosita especial. Por eso es una buena medida dejar a los peques en casa, con alguien que los cuide, bien un canguro o algún amigo o familiar, e ir solos papá y mamá a adquirir lo que anotamos en la lista de la compra del principio.