La lejía es una formulación compleja. Puede ser de gran utilidad a la hora de lavar las prendas de casa, tanto para vestir como las cortinas, las sábanas o colchas. Pero tiene un lado oscuro… ¿Quién no ha tenido alguna vez problemas de usar lejía para la ropa? En este post se recopilan los principales pros y contras de usar este producto de forma doméstica. Adelantamos que es importante siempre saber para qué sí y para qué no se puede utilizar si no queremos decirle adiós a nuestra camiseta o falda favorita.

Pros de usar lejía en casa
1. Elimina manchas difíciles. Si tienes ropa que quedó deteriorada cuando le cayó un vaso de vino o bien se manchó dándole de comer al peque, no te preocupes. La lejía es un producto de lo más eficaz a la hora de terminar con manchas complicadas. Hay formulaciones específicas según si vamos a lavar artículos de color o es ropa blanca, para prendas delicadas o en caso de tratarse de útiles especialmente complejos de limpiar. Lee siempre las instrucciones e indicaciones para no lamentarte después.
2. Desinfecta. Tiene propiedades desinfectantes y es por eso que se usa tanto para la lavadora como a la hora de dejar el baño o la cocina como los chorros del oro. En superficies duras y en espacios donde se haya acumulado mucha suciedad es especialmente eficaz. En el caso de las prendas del armario, no lo dudes. No solo las dejará limpias y relucientes sino que además desinfecta de virus o bacterias que pudieran estar en el ambiente.
3. Poder blanqueante. Para que la ropa blanca quede como nueva está la lejía, probablemente el mejor blanqueante que existe. Combina con suavizan para que la prenda en cuestión no quede demasiado áspera o tiesa. Ah, y no olvides que no cualquier cosa podría lavarse con lejía. Lee las indicaciones que pone la etiqueta de la prenda y del producto que uses y actúa en consecuencia.

Contras: Problemas de usar la lejía en la ropa
Los contras de usar lejía para limpiar prendas de casa son importantes y habría que tenerlos en cuenta. El principal de ellos es que suelen estropear la ropa más que si se usan otras lociones, bien detergentes tradicionales con suavizante o formulaciones específicas para según el tipo de ropa que uses. Si lo que quieres es que tu armario dure mucho tiempo, lo que se recomienda es no abusar de este producto. Hazlo solo en casos en los que lo consideres necesario, bien por extrema suciedad del trapo en sí o porque no te haya funcionado nada alternativo.
Otro de los problemas de usar lejía en la ropa es que puedes manchar determinadas camisas, pantalones o vestidos, según lo que estés lavando, si es algo de color y no has comprado la lejía destinada a esos tejidos específicos. Al final la idea es eliminar manchas y terminas incurriendo en un grave error que acaba con la ropa en el cesto de la basura. ¡Mucho ojo siempre a las etiquetas de los artículos que metas en lavadora o eches en agua con lejía!

Esperamos que estos consejos e indicaciones te ayuden para saber los pros y contras, los problemas que conlleva usar lejía en la ropa. Es cierto que este producto es un poderoso limpiador y desinfectante pero es igualmente cierto que desgasta las prendas en exceso y suelen dañarlas. Lo mejor es recurrir a la lejía solo para prendas blancas o bien para intentar recuperar aquella ropa que tiene manchas difíciles, cuando ya hayas comprobado que ninguna otra cosa te funciona mejor.